TODA UNA VIDA ENTRE RIELES




AUGUSTO DE JESUS LOPEZ DIAZ, es un hombre nacido el 1 de febrero de 1933, pensionado, que durante largos años laboro como maquinista para los ferrocarriles de Colombia, su vida laborar transcurrió entre vías ferroviarias y estaciones de pueblos lejanos de la geografía colombiana donde a diario llegaba con su tren cargado de mercancías, alimentos y materias primas para las industrias de la región.

Inicio sus labores como ayudante de mecánica cuando tenía solo 12 años, pero ingreso a los ferrocarriles por su abuelo paterno el cual era mecánico de trenes con quien trabajo largas jornadas y gano experiencias que le dieron las bases para formarse en su carrera.

Su vida quedo marcada la tarde del 25 de agosto de 1954 cuando por un error cometido por el, su abuelo quien había sido su gran maestro perdió la vida por una falla mecánica en una locomotora. AUGUSTO había dejado inconclusa una reparación y no le aviso a su abuelo el cual tomo la locomotora y trágicamente falleció.

Desde ese momento augusto decidió seguir los pasos de su abuelo y emprender recorrido por las vías férreas de Colombia como conductor de locomotoras.

Su día iniciaba a las 230 de la mañana cuando este se levantaba, tomaba un ligero baño, un tinto y salía para la estación a recoger su maquina. Antes de partir revisaba con mucha precaución los documentos y el estado mecánico para que todo el viaje se realizara sin contratiempo.

1 comentario:

Narrativas II dijo...

Para dónde va esta historia ahora, vive aún tu personajes, el hecho de ser el culpable de la muerte de su abuelo lo convirtió en un hombre ermitaño? Si está vivo qué hace ahora cuando ya casi no hay trenes, cuál maneja ahora? ¿El de la estación de la sabana?